Carrie Mulligan da vida a Kip Glaspie, una detective de Londres que es llamada para investigar un tiroteo en el que murió el repartidor de una pizzería, pero ella rápidamente se da cuanta de que esa es solo la punta del iceberg y que hay muchos involucrados en este incidente que parecía ser al azar.
Siempre es un placer tener una buena miniserie británica a mano. Compuesto por cuatro episodios, ‘Collateral’ es una miniserie de BBC escrita por David Hare (‘The Hours’) y dirigida por S.J. Clarkson (‘Jessica Jones’, ‘The Defenders’). En ella se nos cuenta la historia de un asesinato, de su investigación, sus causas y sus consecuencias en la zona sur de Londres.
Al salir de repartir pizza, Abdullah Asif es asesinado. El homicidio ha sido esmerado y profesional, por lo que la primera pregunta que se le pasa por la cabeza a la detective Kip Glaspie (Carey Mulligan) es ¿quién mata a un repartidor de pizza? El hecho de que la encargada enviase inexplicablemente a la víctima, un refugiado sirio interpretado por Sam Otto, en vez de al que le tocaba, despierta la curiosidad de la policía que se encuentran con que nada es lo que parece.
La famila de Abdullah parece también ocultar algo y se enfrentan a la posibilidad de ser expulsados del país. También hay algo turbulento en Karen (Billie Piper), la mujer que hizo el pedido de pizza y que resulta ser la ex de David Mars (John Simm), un político idealista venido a menos. También nos encontraremos con la figura de Sandrine (Jeany Spark), capitana del ejército que resulta ser clave.